Santa Ana, madre de la Virgen María y abuela de Jesús, es una figura de gran devoción en la tradición cristiana. Considerada patrona de las mujeres embarazadas y de las madres, su intercesión es invocada a menudo por quienes desean un embarazo tranquilo y un parto seguro. Este artículo explora la vida de Santa Ana, su devoción y los pasajes del Evangelio que destacan su importancia.
La vida de Santa Ana
Santa Ana es una figura central de la tradición cristiana, aunque los detalles de su vida no se recogen directamente en los Evangelios canónicos. Su historia se narra principalmente en los Evangelios apócrifos, como el Protoevangelio de Santiago. Según estas fuentes, Ana estaba casada con Joaquín, y juntos rezaban fervientemente por tener un hijo, ya que eran estériles. Sus oraciones fueron escuchadas y Ana dio a luz a María, la futura madre de Jesús.
Santa Ana en los Evangelios
Aunque los Evangelios canónicos no mencionan específicamente a Santa Ana, podemos encontrar referencias implícitas a su importancia a través de la vida y la figura de María.
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Mateo 1:18-23: Este pasaje narra el nacimiento de Jesús y la anunciación a María. Aunque no menciona a Ana, podemos imaginar la influencia de una madre devota en María. «María... se encontró encinta por obra del Espíritu Santo» (Mateo 1,18), refleja una fe profunda que María pudo haber heredado de sus padres, Ana y Joaquín.
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Lucas 1,26-38: La anunciación a María, en la que el ángel Gabriel le anuncia que será la madre de Jesús, pone de relieve la preparación espiritual que María habría recibido de su madre Ana. «He aquí que concebirás un hijo, lo darás a luz y le pondrás por nombre Jesús» (Lucas 1,31).
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Lucas 2,36-38: La profetisa Ana, que esperaba la redención de Israel, es otra figura devota. Aunque no se trata de la misma Ana, el paralelismo entre la entrega de las dos mujeres ofrece un recordatorio de la fe y la esperanza que definen el papel de Santa Ana como madre.
La devoción a Santa Ana
La devoción a Santa Ana está muy extendida en todo el mundo, con numerosos santuarios dedicados a ella. Uno de los más conocidos es el Santuario de Santa Ana en Bretaña (Francia), donde los peregrinos acuden a pedir su intercesión, especialmente las mujeres embarazadas y las que desean ser madres.
Oración a Santa Ana
Las oraciones dirigidas a Santa Ana suelen pedir su intercesión para un embarazo sano y un parto sin complicaciones. Una de las oraciones más comunes reza así:
«Oh gloriosa Santa Ana, que tuviste el privilegio de llevar en tu vientre a la madre de nuestro Salvador, intercede por todas las futuras madres y por todas las mujeres que desean tener hijos. Concédeles tu protección y consuelo».
Santa Ana sigue siendo una figura de gran consuelo y esperanza para muchas mujeres de todo el mundo. Su vida, aunque no se detalla en los Evangelios, resuena profundamente en los corazones de quienes buscan su intercesión. La devoción a Santa Ana nos recuerda la importancia de la fe, la esperanza y el amor en la vida de cada familia.
En «A Mano Desta», nos apoyamos en Santa Ana como fuente de inspiración y reflexión sobre nuestra fe y las responsabilidades que conlleva.